El
método Belga o también denominado Método Tradicional de Madrid, se caracteriza
por la progresiva excavación de los elementos que componen el
túnel, de tal forma que se van retirando los elementos más estables del túnel
evitando el hundimiento o la falta de estabilidad del frente. El método se
denomina método clásico de Madrid por ser el método más empleado en la
construcción de los túneles del metro
de Madrid. Con este método se han construido casi un
centenar de kilómetros de la capital y también se ha usado con éxito en la red
de cercanías.
Se suele aplicar a túneles con un ancho máximo
de unos 8 m libres más 3 m de ambos hastiales, es decir, de un máximo de 11 m.
Es un método muy antiguo y laborioso, y que aún se emplea por diferentes
razones, como por ejemplo, la ejecución de túneles cuya longitud o sección no
permiten realizar la fuerte inversión que una tuneladora requiere , y por otro,
la realización de secciones inclinadas o en zonas urbanas.
Este
método consiste en realizar la excavación abriendo una pequeña galería en clave
del túnel (por métodos manuales, el clásico pico y pila) para ir ensanchándola poco a poco, protegiendo
y entibando el frente, hasta permitir hormigonar toda la bóveda. El
primer elemento excavado es la bóveda del túnel (se suele denominar avance en bóveda o calota). La bóveda se sostiene en el terreno mediante un
entramado progresivo de madera. La bóveda se asegura con un encofrado y cuando está asegurada, la parte
inferior se va excavando a medida que se va asegurando el avance. De esta forma
la galería se va construyendo a medida que se avanza sin poner en riesgo a los
trabajadores debido al hundimiento del túnel. Al abrir pequeñas secciones es
posible solucionar cualquier problema que pudiera surgir de inestabilidad,
puesto que la seguridad del método se basa en que se trabaja con un frente muy
pequeño, normalmente inferior a 3 m2. De hecho, solo se ha producido un accidente grave con este
método, el acontecido en 1971 en la construcción de la línea 7 desde Avenida de
América a Pueblo Nuevo.
Este
método tiene la ventaja de estar muy comprobado en la práctica de la ingeniería
civil, aunque su punto en contra es el
escaso rendimiento en comparación con otros más efectivos, como las tuneladoras
de frente cerrado. Los rendimientos que se
obtienen por este método para los túneles de línea, suelen ser de 2,5 metros
por día y frente de trabajo con tres equipos (12 personas por equipo en tres
turnos). Los avances mensuales por frente de excavación se sitúan entre los 40
y 55 metros.
Esquema de ejecución de un túnel en mina por el método Belga |
Hacemos un resumen del procedimiento constructivo:
•
Se abre una pequeña galería en la clave del túnel que se va ensanchando lateralmente
poco a poco hasta excavar la sección completa de la bóveda. La excavación
se realiza a mano y se entiba con tablas, puntales y longarinas metálicas.
•
Cimbrado y hormigonado de la bóveda.
•
Excavación de la destroza con máquina excavadora y con un desfase respecto a la sección
de avance.
•
Excavación y hormigonado de los hastiales por bataches contrapeados y situados de
forma que soporten dos semianillos contiguos de bóveda.
• Excavación y hormigonado de la contrabóvedaA continuación os pongo algunos vídeos que muestran el método tradicional de construcción de túneles de Madrid. En este primer video no se refleja que las fases de avance están desfasadas en el tiempo, es decir, la galería en avance se realiza muchos metros por delante de la sección en la que se hormigonan los hastiales por bataches.
Por último, os dejo un par de enlaces de archivos pdf que tratan sobre este procedimiento constructivo:
http://www.citop.es/publicaciones/documentos/Cimbra378_08.pdf
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